Una actividad para biólogos y biólogas de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
La vida en el planeta Tierra está totalmente entrelazada. Cada expresión vital es producto de múltiples interacciones entre el mundo biótico y abiótico. Si bien cada forma de vida tiene sus propios límites, necesita nutrirse de la materia y la energía que provee su entorno, incluido otros seres. No entender la interdependencia de la vida con la vida y el cómo este proceso mantiene y moldea el ambiente, nos lleva a los seres humanos a una desconexión con nuestra propia vida y con la naturaleza de la cual somos parte. Esta falta de comprensión nos ha llevado a tener una visión netamente utilitaria de la naturaleza, considerándola fuente de recursos para nuestro propio beneficio, lo que ha fortalecido la degradación del ambiente y sus procesos ecológicos. A su vez, esto condujo a la cultura actual, con valores que no se corresponden con el cuidado de la vida.
En círculo nos conocemos
Los futuros profesionales de las ciencias biológicas tienen la posibilidad de conocer, contemplar y comprender la importancia de la trama que forma la vida para autogenerarse, autoconservarse y evolucionar. Sumarle a este proceso cognitivo experiencias de conexión con las emociones, sensaciones, creatividad, sensibilidad, contemplación, quietud, etc., puede ayudar a comprender los patrones y procesos que nos rodean de una forma más integral y orgánica y activar una conciencia de cuidado que nos define como seres humanos.
Círculo de cultura que invitó a la reflexión sobre nuestra conexión con la naturaleza
Respiración consciente, aquí y ahora
El biocentrismo propone priorizar la vida en cada acto y en cada decisión que tomemos como seres humanos. Supone organizarnos en función de la existencia, incluido, vivir plenamente. Para esto es esencial que percibamos la interconexión de los seres vivos y la naturaleza en su totalidad, creyéndonos y sintiéndonos parte. En este contexto, consideramos que sentirse parte de la trama de la vida es un ejercicio vital del quehacer científico, íntegro y comprometido hacia el bien común. Así, antes de separar los diferentes componentes de los seres vivos o del ambiente para su estudio, es clave entender el grado vivencial de la interconexión de la vida. Esta visión potenciará la formación académica y un futuro trabajo como biólogos/as.
Ser parte de la trama de la vida
Escuchar y sentir el suelo, compartir sensaciones
El pasado 15 de octubre se realizó un Encuentro Vivencial Biocéntrico en la Naturaleza con el objetivo de proponer una mirada integral de la vida a quienes comienzan a recorrer el camino de la academia y de la educación en biología. Se buscó, a través de diferentes ejercicios vivenciales y de reflexión, conectar con la naturaleza en un ambiente natural como la Laguna de los Padres (Pdo. de Gral. Pueyrredon, Sistema de Tandilia), que invitó a sentir y experimentar las relaciones y las tramas que suceden en la naturaleza.
Facilitadores de la actividad: Paula Darwich, Lic. y Prof. en Biología, Especialista en Enseñanza de las Cs. Naturales, Educadora Biocéntrica, Facilitadora de Biodanza; Germán – Dr. en Biología – Inv. CONICET – Instructor de Yoga, Facilitador de Biodanza (FFT); Lorena Herrera – Dra. en Biología, Inv. CONICET – Facilitadora de Biodanza.
Agradecemos a la Prof. Silvia De Marco (FCEyN, UNMdP) por llevar esta propuesta a sus alumnos de la materia Introducción a la Biología del primer año de la Carrera.
Contacto: paudarwich@gmail.com, germans@fi.mdp.edu.ar, lherrera@mdp.edu.ar